La Amatista es un tipo de cristal de piedra color violeta. El péndulo de amatista posee las mismas propiedades fundamentales que el péndulo de cristal de roca. Sin embargo, la amatista presenta particularidades interesantes.
La amatista proviene del nombre griego amethystos que se traduce literalmente como « no-intoxicado » ó « no-ebrio ». Los griegos creían que la Amatista los protegía de la ebriedad y lo utilizarían como remedio a esta última. Cuenta la leyenda que Baco habría dado su color amatista, vertiendo vino tinto sobre un cristal.
Veamos juntos cuales son las propiedades y usos del péndulo amatista. Descubrid también ¡dónde comprar vuestro péndulo de amatista!
Las propiedades de la amatista
La amatista comparte en gran parte las propiedades físicas del cristal de roca. Ella comparte en particular las propiedades dichas « piezoeléctricas » de esta última. Como tal, puede concentrar, amplificar, conservar y transformar la energía. Tiene la misma duración que el cristal de roca. Pero a diferencia del cristal de roca, la amatista es sensible a los rayos ultravioleta. En efecto, es a través de la irradiación que adquiere su color.
Usos históricos de la amatista
La amatista es muy utilizada en joyería. Traspasa tiempos y civilizaciones. La encontramos en los pendientes del antiguo Egipto hasta la Roma antigua. Ella está presente en los anillos de la iglesia anglicana, los amuletos de la Europa medieval, y bajo la forma de perlas dentro de las tumbas anglo-sajonas. La amatista es una piedra sagrada para los Tibetanos. Encontramos rosarios tibetanos hecho con perlas de amatista. Antes de que los grandes depósitos hayan sido descubiertos, la amatista formaba parte de las piedras más preciosas.
La amatista en litoterapia (terapia de piedras)
En litoterapia la amatista es una piedra de predilección para tratar problemas físicos. Está particularmente adaptada para el cuidado del sistema nervioso. Se recomienda también para las personas que padecen de insomnio o aquellos que tienen pesadillas. Seguido se recomienda para equilibrar las emociones. La amatista tiene su lugar en la radiestesia médica o en muchos otros tratamientos energéticos para traer la calma, restaurar la confianza en uno mismo o mantener la meditación. Tradicionalmente se relaciona con el signo del zodiaco Aries.
La amatista y el color violeta están relacionados con el chakra de la corona. Este chakra, nombrado Sahasrara, se sitúa en la parte superior del cráneo. Es el chakra de la consciencia pura, de nuestro nexo con lo divino y el universo. Este cristal nos calma y nos relaciona con la espiritualidad. El violeta es el color más alto del espectro visible. Nos lleva hacia los cielos y los dioses.
La amatista es la piedra para equilibrar el chakra de la corona. Nos ayuda a abrir nuestra consciencia superior para pensar con claridad. La vibración violeta nos ayuda también a ponernos en contacto con nuestra intuición.
La amatista tiene una estructura natural en puntas piramidales. Esta forma permite amplificar y difundir la energía. Esto hace de ella una piedra particularmente adecuada para el péndulo. La punta del péndulo determina con precisión tanto en la transmisión como en la recepción.
Descubrid las propiedades de la piedra Amatista como piedra y como péndulo
¿Cómo reconocer un péndulo en amatista de buena calidad?
¡Ojo! Existen en el mercado piedras de amatista sintéticas. Aseguraos de adquirir un péndulo en amatista de piedra natural. Existe una gran diferencia entre los dos. Nosotros os recomendamos sin duda alguna, la piedra natural.
La amatista forma naturalmente un prisma de seis caras con una punta piramidal. Más vale adquirir una piedra naturalmente formada, que una piedra tallada en masa para llegar a esta forma. La piedra puede haber sido pulida respetando su forma original.
Como para el cristal de roca, inspeccionad los bordes los cuales deben ser afilados y tener la claridad de la amatista. El criterio de base para escoger esta piedra es el color. Existe una increíble paleta de violetas, tirando hacia el rojo o el azul.
Las más bellas piedras provienen de Asia, Sri Lanka así como de Siberia y Brasil. La existencia de un gran depósito en Brasil, hace que las piedras de ese orígen sean más accesibles.
Luego de que hayáis elegido vuestro péndulo en amatista, como para cualquier otro péndulo, confiad en vuestro resentir. En radiestesia, se considera que el mineral emite ciertas ondas. Algunas están en resonancia con vosotros y otras menos… Estad a la escucha de esta resonancia. Para escoger bien su piedra, consultad el artículo « ¿Qué piedra elegir para vuestro péndulo? »
Cuidados del péndulo en amatista
Más vale evitar exponer la amatista al sol, ya que contrariamente al cristal de roca puro, la amatista absorbe los rayos del sol. Es también sensible al calor. ¡El sol y el calor pueden llegar a modificar el color de vuestra piedra! Si esto llegase a pasar, el color de vuestra amatista perdería entonces su potencia y podría parecer débil o estropeada.
Por lo tanto, se recomienda dar mantenimiento a la amatista sumergiéndola en agua fría. Si ha acumulado algo de polvo, podéis frotarla con una pequeña cantidad de jabón, de vez en cuando.
Para cuidar de vuestra amatista, podéis también ponerla en contacto con un cristal de roca transparente de talla más grande. Lo mejor es posicionar vuestra amatista dentro de una geoda de cuarzo, si poseéis una.
Lo ideal sería limpiar vuestra amatista con un limpiador ultrasónico. Si poseéis una gran colección de cristales, esta pequeña máquina os podría resultar de utilidad.
Al momento de transportar vuestro péndulo de amatista, se recomienda protegerlo en una bolsita. Escoged un bolsillo hecho de un material suave, con cierta solidez para proteger vuestro péndulo. Poned especial atención a los metales y a los objetos puntiagudos que podrían rayar vuestra amatista. Por ejemplo, no poner vuestro péndulo dentro de vuestra bolsillo donde tengáis las llaves.
Usos del péndulo de amatista
Vuestro péndulo amatista se utiliza como cualquier otro péndulo de otro material. Sin embargo, el péndulo de amatista, al igual que el péndulo de cristal de roca, requieren de un mayor mantenimiento que un péndulo de radiestesia en madera, por ejemplo. Esto aplica para todos los péndulos hechos de piedras preciosas o semipreciosas.
Las propiedades energéticas del cristal, su forma y la vibración del color violeta hacen de la amatista una piedra de elección para el péndulo. El péndulo de amatista funciona como un amplificador. Se recomienda, de preferencia, para los principiantes ya que la amatista favorece la intuición. Nos ayuda también a conectar con nuestra dimensión espiritual. Por lo tanto, la piedra se puede adaptar a un péndulo ya que nos pone en contacto con el mundo de las vibraciones. El péndulo en amatista es también un muy bello objeto, ¡a vosotros de elegir el vuestro!
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